Un equipo de estudiantes de Ingeniería en Alimentos del Tec campus Querétaro fue seleccionado como uno de los seis finalistas del concurso internacional del Institute of Food Technologists (IFT) por desarrollar un burrito vegano.
El equipo está conformado por Trinela Rodríguez, Rocío Adriana Posada, Mariana Fernández y Julieta Galván,
Su proyecto es un burrito diseñado específicamente para militares y con el objetivo de que se pueda consumir en cualquier momento.
El próximo 13 de julio, el equipo queretano presentará su proyecto en el congreso en Chicago, representando a México y Latinoamérica.
“El IFT es la institución más grande que hay en el área de alimentos a nivel internacional. Durante su congreso anual, hay una expo con stands y múltiples competencias”, explicó Mariana.

El burrito que lo puede con todo, aseguran
Las alumnas de Ingeniería en Alimentos del Tec campus Querétaro desarrollaron un burrito vegano, sin gluten empacado al vacío, está esterilizado y viene en pouches o bolsas.
“Es un burrito que tiene tortilla sin gluten, pollo vegano sin gluten, frijoles, arroz y guacamole. El guacamole está secado por aspersión”, señaló Trinela.
Está diseñado esencialmente para los militares, entusiastas de las actividades al aire libre y las personas que se enfrentan a situaciones de emergencia como terremotos o huracanes.
“Nuestro burrito tiene un adaptógeno que ayuda en la parte cognitiva, el estrés y la ansiedad para este tipo de escenarios. Al momento en que lo ingieren, la función que tenemos es ayudarles en lidiar con sus emociones”, agregó Adriana.
Es un producto para los que necesitan alimentos de conveniencia en segundos, el cual perdure por un largo tiempo sin cuidados especiales.

La fase de postulación
Durante el congreso de IFT se llevan a cabo diversas competencias, por ejemplo, de snacks para niños, soluciones para países en desarrollo y desarrollo de productos. A esta última pertenece el equipo queretano.
"Se te pide que subas una propuesta con tu alimento, pero tienes que cubrir todo lo que implicaría desarrollarlo, o sea, toda la parte de seguridad, inocuidad, formulación, lo nutricional, procesos, costos y marketing”, mencionó Mariana.
Al inicio se sube un documento y, a partir de ello, se escogen los 6 finalistas que irían a este congreso a Chicago a exponer sus presentaciones orales y sensoriales.
“Nuestro burrito tiene un adaptógeno que ayuda en la parte cognitiva, el estrés y la ansiedad; al momento que lo ingieren, les ayuda a lidiar con sus emociones”.- Adriana Posada.
La unión hace la fuerza
El equipo inició a trabajar en este proyecto durante vacaciones, por lo que estaban separadas y fue un poco complicado coordinar sus horarios. Además, mencionaron que nos sabían por dónde empezar.
“Nos genera confianza mutua que todas le metemos todas las ganas del mundo y mucha creatividad cuando se presenta un problema y en nada ya lo estamos resolviendo”, agregaron.
Expresaron que su mayor reto será cuando hagan la presentación oral, ya que debe de haber un gran control de nervios para poder demostrar plenamente la razón por la que se llaman a sí mismas: “máquina de trabajo”.
“Vamos a tener que echarle las ganas del mundo, porque ya es la recta final de probar que todo lo que hemos trabajado, y pues vale la pena saberlo comunicar bien”, comentó Mariana.

Este proyecto ha sido un gran reto para ellas, pues para lograr llegar a la fase final, debieron englobar todas las áreas de su carrera. No obstante, agradecen la ayuda de los profesores, las instalaciones y herramientas que ofrece el campus.
“Queremos agradecer al profesor Rubén por siempre haber estado dispuesto a resolver nuestras dudas y asegurarse de que tengamos los medios para llegar allá para sacarle el mayor provecho”, concluyeron.
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